Repensando las promesas de la imagen
Resumen
Desterrada cualquier ontología de la imagen, ésta abre su sentido a
una multiplicidad de operaciones cognitivas. Están quienes mantienen
aún cierta confianza en ella; quienes en el extremo opuesto, asentados
en su cinismo, rechazan cualquier tipo de relación entre la imagen y lo real; quienes la piensan como un signo de manipulación; y podríamos
seguir, así, multiplicando posicionamientos.
En estas páginas nos proponemos indagar la agentividad de las imágenes
en un recorte sesgado al desafío propuesto por esta sisífica
empresa. Tomando como punto de partida una relectura de John L.
Austin (1962 [2008]), lo que nos interesa es reflexionar acerca de la
productividad de sus planteamientos epistemológicos para examinar
el estatuto de las imágenes en algunas producciones de arte contemporáneo,
y poder pensar, desde allí, lo que hemos denominado las
promesas de la imagen.
Entendemos que ciertas manifestaciones artísticas tematizan hoy
explícitamente el problema de qué es aquello que podemos hacer
con las imágenes, o más específicamente, qué se puede hacer con ese
magma de visualidad disponible—cada vez más, supernumerario y
anónimo —. La hipótesis del montaje como una forma de conocimiento del
mundo, como una operación epistémica, presente en estos planteamientos,
y con anterioridad en teóricos y realizadores como Sergei
Eisenstein o Lev Kuleshov, funciona en nuestra argumentación como
una operación testigo. Ésta nos da algunas claves heurísticas para
indagar en la performatividad de la imagen en dos obras del artista
checoslovaco–alemán, Harun Farocki: el film–ensayo Stilleben (Naturaleza
muerta, 1997) y la videoinstalación Ernste Spiele III: Eine Sonne
ohne Schatten (Juegos Serios III: Inmersión, 2010). Repensar, entonces, el estatuto de la imagen en una sociedad en
la que su producción se multiplica con la misma celeridad que los
pactos que con ella se establecen (pacto de verdad, pacto de confianza,
pacto cínico, entre otros) nos abre a una serie de interrogantes: ¿cuál
es el estatuto que las imágenes adquieren en esta coyuntura? ¿cómo
enfrentarse a ese magma de visualidad anónima que circunda y circula
entre sujetos e instituciones? ¿cómo caracterizar la potencialidad
performativa, epistémica y pragmática, de ese excedente visual? Sobre
estas preguntas volveremos en las páginas que continúan.
Autor
Pérez Rial, Agustina
Acebal, Martín
Fecha
2014Categorías
Artes Visuales | Curaduría de Artes | Semiótica
Materia
Imagen | Pragmatismo | Videoinstalación | Performatividad