Ouvrard: una galaxia de caleidoscópicos fragmentos
Resumen
Luis Ouvrard nació en Rosario en 1999, sus padres vinieron del Périgord, antigua provincia francesa, comarca imaginaria a la que volverá recurrentemente. La mayor parte de su vida profesional la dedicó a su trabajo como restaurador de pinturas, esculturas, imágenes religiosas y muñecas y a sus clases como profesor de color. Pintaba los domingos recurriendo a los géneros más transitados como el retrato, la naturaleza muerta, el paisaje y las figuras. Pero al promediar la década de los 50, cuando se jubiló, se produjo un cambio profundo en su obra. Como típico pintor de naturalezas muertas, Ouvrard entendía que la clave de su trabajo radicaba en la relación con los objetos que conjuraba en la tela. Cosas con las que establecía un fuerte vínculo de intimidad y reflexión permanente. En realidad lo que pintaba era una conversación ininterrumpida con aquellos tesoros de su proximidad.
Autor
Baeza, Federico
Fecha
2016Categorías
Crítica de Artes | Curaduría de Artes | Artes Visuales
Materia
Ouvrard | Museo Castagnino | Pintura